miércoles, 28 de enero de 2009

“EDUCACIÓN EN SALUD PARA UNA VIDA SALUDABLE”


Por: Eda Sánchez Oliva
Profesora Adscrita al Departamento de Ciencias de la Educación

La educación es un proceso que se desarrolla a lo largo de toda la vida, contribuye a la formación integral y pleno desarrollo de potencialidades, de las personas; a la creación de cultura y al desarrollo de la familia y de la comunidad nacional, latinoamericana y mundial.

La escuela tiene la responsabilidad no sólo de instruir, sino también de desarrollar hábitos apropiados, prácticas y actitudes que beneficien la salud del niño, del púber, del adolescente.

El docente, es el agente fundamental del proceso educativo y tiene como misión contribuir eficazmente en la formación de los estudiantes en todas las dimensiones del desarrollo humano. Una persona educada debe conocer los fundamentos básicos de Educación para la Salud para estar en condiciones de proteger su propia salud, la de sus familiares y de colaborar en el fomento de la salud de su comunidad.

Educación para la Salud es una práctica antigua, es un proceso de formación, de responsabilidad del individuo a fin de que adquiera los conocimientos, las actitudes y los hábitos básicos para la defensa de la salud individual y colectiva. Es decir, como un intento de responsabilizar al alumno y de prepararlo para que, poco a poco, adopte un estilo de vida lo más sano posible y unas conductas positivas saludables; que le permitan prevenir las enfermedades y promocionar la salud.

Salas, C y Álvarez, L (2000:31) reportan que la Organización Mundial de la Salud (OMS) define la educación para la salud como “el conocimiento e interés de todas aquellas experiencias del individuo, del grupo o de la comunidad que influyen en las creencias, actitudes y conducta respecto a la salud, así como por los procesos y esfuerzos para producir cambios a fin de lograr un nivel óptimo de ellos”.

Serrano (1998) indica que la Educación para la salud debe impartirse desde los primeros niveles de estudios, se debe dar como eje transversal en el proceso educativo. Asimismo. Reig, A.; Cabrero, J y otros (2000) en un trabajo de investigación sobre “la calidad de vida y el estado de salud de los estudiantes universitarios de la universidad de Alicate”, identifican una serie de cuestiones relevantes que tienen que ver con la salud del estudiante universitario. Este estudio es un profundo acercamiento a mejorar la calidad de vida de los estudiantes, de los profesores, del personal administrativo y servicio y de la comunidad en general. Es decir pretender crear una universidad saludable, aplicando una metodología innovadora que prevenga y promueva la salud.

Urge trabajar los valores en los campos de educación para la salud que facilite el autoanálisis, la disposición para el cambio de estilos de vida, la interiorización de actitudes y la construcción de una autoestima positiva; elementos claves para la vida humana. De esta manera se logrará una vida saludable.