miércoles, 30 de abril de 2008

La identidad de una universidad católica no depende de estadísticas sino de convicción






Lic. Luis Enrique Pérez
Profesor Adscrito al Departamento de Ciencias Teológicas


Es sabido por todos nosotros que Su Santidad Benedicto XVI ha estado del 15 al 20 de abril en Estados Unidos; visita que no sólo ha sido un “signo de esperanza” para los católicos que viven su fe sino porque había la expectativa de muchos norteamericanos de escuchar al Vicario de Cristo respecto a los problemas y temas actuales.

Ciertamente el mensaje a la Universidad Católica de América (del 17 abril), ha sido de particular importancia, también para nosotros. Aquí quiero citar algunas palabras del Romano Pontífice.

“La identidad católica no depende de estadísticas. Tampoco se la puede equiparar simplemente con la ortodoxia del contenido de los cursos”. Es innegable que nuestra universidad ha crecido en número de estudiantes y en Escuelas Profesionales, aspecto que nos enorgullece y anima a dar lo mejor de nosotros por el bien de nuestros estudiantes. Pero ¿qué será lo mejor de nosotros que signifique también identificación con nuestra alma mater? La respuesta que nos ofrece su Santidad se resume en lo bien que puede ser un programa dinamizador: “La dinámica entre encuentro personal, conocimiento y testimonio cristiano”. Es claro el llamado que Benedicto XVI, nos hace a todos: profesores, administrativos y personal en general, porque todos estamos involucrados en el quehacer universitario, somos el rostro humano y cristiano de nuestra universidad.

El encuentro personal con Cristo –cabeza y fundamento de la Iglesia– es el fundamento principal de toda universidad católica. Siendo así que nuestra labor universitaria encuentra el frescor cotidiano y alegre luego del encuentro con Jesús Eucaristía. Este aspecto de nuestra jornada laboral es importante puesto que para un cristiano convencido toda acción empieza y culmina en Él como toda acción de la Iglesia inicia y culmina en el Altar del Señor. Participar de la Eucaristía como “comunidad eclesial” dentro de nuestra casa de estudios es expresión auténtica de que no solo laboramos sino que nos identificamos con su misma esencia: ser católica y es el “testimonio público de Cristo” que “modela cualquier aspecto de la vida institucional, tanto dentro como fuera de las aulas”. ¿Cómo podrán nuestros jóvenes estudiantes motivarse a un encuentro con Cristo si no ven en los profesores católicos íntimos amigos de Jesús Eucaristía? Porque “promover la intimidad personal con Jesucristo y el testimonio comunitario… es indispensable en las instituciones formativas católicas”.

Además, como bien lo expresa su Santidad, “la competencia y el testimonio” tienen también una enorme importancia. Es interesante resaltar la unidad de estos dos aspectos: la competencia asegura el paso en la búsqueda acertada de la Verdad. El testimonio –cristiano– manifiesta que la Verdad es Cristo. Ser competentes en lo que hacemos es nuestro máximo anhelo y responsabilidad. Sin embargo, esto sin el testimonio de vida cristiana, compromete la identificación con lo que somos y debemos ser, dificulta “suscitar entre los jóvenes el deseo de un acto de fe, animándolos a comprometerse con la vida eclesial que nace de este acto de fe”.

Finalmente, nos exhorta con estas palabras: “Alimenten su testimonio con la oración. Den razón de la esperanza que caracteriza sus vidas (Cfr. 1 Pe 3,15), viviendo la verdad que proponen a sus estudiantes. Ayúdenles a conocer y a amar a Aquel que han encontrado, cuya verdad y bondad ustedes han experimentado con alegría”.

Por lo tanto, realizar este programa dinamizador y ¡todos los días! es una cuestión de convicción. Buenas cátedras impresionan, y un trabajo bien hecho es loable. El testimonio de vida cristiana es un llamado, cuestiona y arrastra a otros.

lunes, 28 de abril de 2008

De la luna…su lágrima

Velia Beltrán Centurión
Docente adscrita al Dpto. de Arquitectura

El runa simi “lengua de los hombres” trastocada a “lengua de indios” a la llegada de los españoles -aunque no deja de ser motivo de orgullo para los peruanos por su versatilidad y dulzura- no resulta muy adecuado cuando los naturales de esta zona costera del norte del Perú nos encontramos en la búsqueda de vocablos que nos caractericen para destacarlos, pues no dibuja nuestra identidad local.

El Muchik en cambio, es la lengua oriunda de nuestra región, señalada por algunos autores como Yunga -tal vez porque así se refirieron a ella los primeros cronistas, para diferenciar la lengua que hablaban los nativos de las zonas más templadas, del Quechua o runa simi que se hablaba en las zonas más altas-. Esta “sinonimia” no nos parece muy adecuada debido a que encontramos zonas yunga también en el sur como en flanco oriental de la cordillera e inclusive fuera de nuestro territorio (Cochabamba – Bolivia, Jujuy – Argentina) por lo que resulta siendo imprecisa de modo que quedémonos denominándola Muchik únicamente.

No se trata de negar a un idioma autóctono para encumbrar a otro, sino de tomar conciencia de que tenemos muchas cosas más que valorar; podríamos aplicar el símil de lo que sucede con el Pisco Sour, que es el trago nacional, pero además los norteños contamos con nuestro delicioso trago regional, el Cóctel de Algarrobina.
Hoy centraremos nuestra atención en el loche ya que encaja con nuestra búsqueda de elementos que nos caracterizan, denominado por un vocablo de origen Muchik, el que ha sido bautizado con el epíteto de “Oro Mochica” en atención tanto a su gran valía como a la fuerte coloración de su interior -que varía de los amarillos intensos hasta tonos casi naranja- debida a su alta concentración de xantofilas y carotenos, lo que nos habla de sus bondades alimenticias.


Concientes como estamos de que conociendo el pasado tenemos mayor capacidad de comprender y valorar el presente, para proyectarnos a un mejor futuro, fuimos a donde los especialistas en tratar de revivir esta lengua casi extinta, de la que solo subsisten una regular cantidad de vocablos -nombrando a los productos típicos de flora y fauna de esta región así como algunos toponímicos y apellidos-, y encontramos que el significado de la palabra loche vendría a ser algo así como “Lágrima de la luna”; y decimos algo así, pues no se conoce con certeza la estructura gramatical de esta lengua, lo que sí está claro es que significa que de la luna cayó una lágrima, no resultando quizá tan relevante la manera en que ésto se pueda expresar, sino el significado en sí mismo.

Ahora bien, no creemos que sea posible dar la traducción exacta debido a que en cualquiera de las formas que intentemos hacerlo, estaríamos siempre sesgados por la estructura gramatical occidental que poseemos, ya que no se conoce a ciencia cierta en qué medida la sintaxis, alguna declinación o un sufijo o prefijo, podría imprimir, enfatizar o cambiar un vocablo. ¿Lágrima de la luna? Lágrima de luna? De la luna su lágrima?... mmm… no, tal vez si fuera del oriente su fruto.

Y esto casi poético no es un hecho aislado, al parecer nuestros ancestros que supieron vivir en armonía con su entorno pudieron encontrar maneras de denominar a las cosas, diríase que tratando de escucharlas hablar y preguntándoles respetuosamente cómo les gustaría ser nombradas. Y el loche respondió; lo hizo a través de su forma… Una gota, una lágrima… y lo dijo con su génesis, pues su siembra y su cosecha están íntimamente ligadas a los “estados de ánimo” de la luna, es decir con sus fases.

El loche será lo máximo –para mí lo es- pero tampoco es pepita de oro para gustarle a todo mundo, y lo que subyace a su nombre que a unos nos puede fascinar, a otros sencillamente les puede resultar indiferente o inclusive no gustarles… y no vamos a negar que no ha de faltar a quien no sólo no le agrade el significado sino hasta le parezca lúgubre porque relaciona las lágrimas con tristeza, pero… ¿es que acaso no hay lágrimas de felicidad? Y me atrevería a afirmar que son las más auténticas.

viernes, 25 de abril de 2008

El Discurso del Papa Benedicto XVI a la ONU



II parte



P. Angel Arrebola Fernández
Profesor de Derecho Eclesiástico del Estado.



Siguiendo con la exposición del discurso de Benedicto XVI a la ONU, y enlazando con el primer tema que presentábamos sobre el principio de la “responsabilidad de proteger” los derechos humanos; diremos que en segundo lugar, al abundar esta “reponsabilidad de proteger”, se llega al núcleo y fundamento tanto de este principio así como de todos los derechos humanos.

Los documentos internacionales que proclaman y tutelan los derechos humanos tienen, como lógica consecuencia de su origen y finalidad, un carácter eminentemente práctico y no se detiene a profundizar sobre la naturaleza y fundamentación de estos derechos. Pese a ello, en todos estos documentos, mediante expresiones más o menos rigurosas, se afirma, al menos implícitamente[1], que estos derechos corresponden al hombre con carácter previo a que sean acogidos o no por los ordenamientos jurídicos positivos. Las declaraciones, pactos internacionales o legislaciones internas de los Estados no crean estos derechos, sencillamente los reconocen.

Si los derechos humanos son exigencias de justicia inherentes a la dignidad de la persona quiere decir que tales exigencias radican en la propia naturaleza humana. Surgen, por tanto con cada hombre: son derechos de la persona. Y la persona es criatura, con un estatuto ontológico determinado, que ha sido establecido por el Creador –Dios, el ser por esencia-. Que el hombre viva en la historia, que esté dotado de libertad y que, por ello, reconozca más o menos derechos humanos en un momento determinado o tutele mejor unos u otros derechos humanos según las épocas y los ámbitos culturales, no es incompatible –más bien es una confirmación, porque también la libertad forma parte del estatuto ontológico del hombre- con una fundamentación metafísica absoluta (la dignidad de la persona) de los derechos humanos.

De ahí que haya podido decirse, con toda razón, que el iusnaturalismo “es la verdadera ratio communis, el único sistema jurídico que puede ofrecer a tales derechos una base común y estable para su reconocimiento y correcta aplicación”. En efecto, sólo la existencia de un Derecho natural, universal, superior y previo a cualquier sistema de Derecho positivo, puede dar razón de esa conciencia jurídica común que impulsa y alienta el movimiento a favor de los derechos humanos

Finalmente, se detiene Benedicto XVI en señalar el Derecho de libertad Religiosa que recoge el artículo 18 de la Declaración Universal de los derechos humanos. El efectivo reconocimiento de este derecho no puede quedarse en un mero reconocimiento de la libertad de culto. Es decir que cada individuo tiene la libertad jurídica para establecer centros de culto, para realizar sus expresiones públicas de fe, etc. Sino que reclama también como contenido de esa libertad el derecho que asiste a los creyentes, sean de la confesión que sean, a iluminar desde la fe los acontecimientos de la vida de sus respectivos países. Como dice el pontífice: “Es inconcebible, por tanto, que los creyentes tengan que suprimir una parte de sí mismos –su fe- para ser ciudadanos activos”.

Desde una opción religiosa determinada se puede también contribuir a la edificación de una sociedad más justa e igualitaria, sin correr el riesgo de sacralizar la vida política, puesto que la fe tiene también una dimensión pública, netamente social cuyo fundamento es Dios, pero cuyos principios pueden ser asumidos en la consecución del Bien Común, por el conjunto de la sociedad.
No reconocer esta dimensión pública de la fe, y su aporte a la sociedad, “privilegiaría efectivamente un planteamiento individualista y fragmentaría la unidad de la persona”.

El reconocimiento de la dignidad de la persona, fundamento último de los derechos humanos. hace que se reconozca también el derecho natural como sustento y garantía de la permanencia de estos derechos reconocidos por todos, así como el aporte constante de los creyentes a una sociedad, cada vez más fragmentada, pero que está sedienta de pilares firmes en los que se asiente la defensa y promoción de la persona humana, hacen de este discurso una pieza clave y que tendrá seguro importantes consecuencias en las políticas de la ONU, y en la reflexión jurídica sobre la esencia de los Derechos Humanos al cumplirse el sexagésimo aniversario de su proclamación.

[1] Es lo que sucede en la Declaración en el Considerando primero: “Considerando que la libertad, la justicia y la paz en el mundo tienen por base el reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la familia humana; “

El Discurso de Benedicto XVI a la ONU

I parte


P. Angel Arrebola Fernández
Profesor de Derecho Eclesiástico del Estado


La visita de Benedicto XVI a los Estados Unidos ha supuesto, sin duda, la noticia de la semana. Los periodistas, ávidos de noticias morbosas, han dedicado sus mejores páginas a las declaraciones del pontífice sobre los abusos sexuales a menores por parte de algunos sacerdotes en ese país. Escándalo que ha supuesto para todo el mundo, la Iglesia y el propio Papa un motivo de sufrimiento no pequeño, como él mismo señaló.

Los ecos de esa visita irán encontrando una profunda huella conforme pasen los días. Quizá lo más llamativo sea lo titulado en los diarios, pero la enseñanza pontificia expuesta a lo largo de estas jornadas alcanza temas de mucha más amplitud y calado, como siempre que el Sucesor de Pedro expone alguna doctrina de manera ordenada y sistemática como es el caso de una peregrinación pastoral de esta envergadura, donde cada discurso está perfectamente medido y tiene que ser degustado, pensado y asimilado por quienes estamos verdaderamente interesados en el bien de la sociedad y en la exposición de la verdad para todos los hombres de buena voluntad.

Es el caso del magnífico discurso pronunciado ante la Asamblea General de las Naciones Unidas. Un discurso denso, armoniosamente articulado, y donde el Pontífice ha expuesto el fundamento último de los derechos humanos, al cumplirse el sexagésimo aniversario de la Declaración Universal, de 19 de Diciembre de 1948.

Como ya hicieran sus antecesores Pablo VI, el 4 de Octubre de 1965, y Juan Pablo II, el 5 Octubre de 1995, también el actual Papa ha sido invitado por el Secretario General de las Naciones Unidas a dirigirse a la Asamblea General, en la que la Santa Sede tiene el status de Observador Permanente. Este es un primer dato que no podemos pasar por alto. La situación de la Santa Sede en el panorama internacional hace que tenga el reconocimiento de una autoridad moral que no tiene ninguna otra institución religiosa. A pesar de los escándalos, la Iglesia Católica es reconocida en el mayor foro del mundo sobre Derechos Humanos, como experta en humanidad y su palabra es requerida y reconocida por todas las naciones tanto en las que la mayoría es cristiana, en aquellas donde el cristianismo es minoría e, incluso en un foro donde están presentes representantes de países en los que el cristianismo es perseguido.

Recordando los principios de fundación de las Naciones Unidas por la carta de San Francisco de 25 Junio de 1945, hacía notar el Pontífice, en su discurso, que estos principios, sin agotar todo el bien común de toda la comunidad humana, suponen un esfuerzo notable en el avance para conseguirlo, así como expresan “las justas aspiraciones del Espíritu humano” y ponen de manifiesto “los ideales subyacentes en las relaciones humanas”.

Tres son, a mi juicio, los aportes importantes de este discurso; por una parte Benedicto XVI expone el principio de la “responsabilidad de proteger”. Por ser los derechos humanos no una cesión de los estados a favor de cada individuo, sino una propiedad inalienable de cada ser humano, y esto de manera universal. Es decir, los derechos humanos son universales, indivisibles e interdependientes, de modo que hablemos del ser humano que hablemos en cualquier lugar y circunstancia del mundo, el conjunto de derechos le pertenecen en virtud de la Dignidad que como persona humana tiene. Es por ello que el reconocimiento y la salvaguarda de esta dignidad humana, y en consecuencia de sus derechos, no sólo corresponde al gobierno del país en el que se encuentra el individuo, sino también, como ya señalara el Dominico español Francisco de Vitoria, a toda la comunidad internacional que debe de establecer las garantías necesarias para que estos derechos puedan ser efectivos. Y esto, como dice el Papa, sin reducir la custodia de estos derechos a un planteamiento “pragmático, limitado a determinar “un terreno común”, minimalista en los contenidos y débil en su efectividad”.

Es por esto que la comunidad internacional, cuya máxima expresión son las Naciones Unidas -sociedad nacida tras los desastres de las dos guerras mundiales- tienen, como les ha recordado el pontífice, un lugar primario en la promoción y la garantía al velar por la dignidad de toda persona humana, y se deberán procurar los procedimientos e instrumentos jurídicos y políticos necesarios para que la persona humana sea respetada y custodiada como el primer patrimonio de la humanidad.

viernes, 18 de abril de 2008

La Ruta de bienvenida a APEC Chiclayo: Ruta Crítica

Gabriel Gallo Olmos
Docente adscrito al Dpto. de Cs. Empresariales

Estuve el fin de semana en el Aeropuerto imaginando la afluencia de miles de personas que vendrán a nuestra ciudad la última semana de agosto a las reuniones vinculadas al APEC- PERU en Chiclayo, donde 21 ministros y Funcionarios debatirán el importante tópico sobre Pymes, Emprendedores e Innovación tecnológica

Ruta Física
¿ Serán suficientes 4 meses para desarrollar actividades simultáneas que constituyen “ Ruta Crítica” ?:

El interior del aeropuerto está presentable , pero no es espacioso para delegaciones simultaneas . Debe prosperar el proyecto de adecuar el Aeroclub para recepción de visitantes
La salida natural de los vehículos será ir por la Av. Fitzcarrald- Bolognesi- Av. Leonardo Ortiz- Av. Elvira García .Gran Hotel Chiclayo y otros hoteles , Las pistas requieren urgente carpeta asfáltica y hay serios baches frente a Ozone, y habrá que señalizarlas para esos días
Crecerán en 4 meses flores y grass americano ( transplantado) en la acequia de la Av. Fistzcarrald ?
Se podrá pintar de manera uniforme todas las casas de la Av. Fitzcarrald ?
Sobre el estado de los desagües, un entendido me daba el consuelo que , en Agosto no llueve y por ello habrán menos problemas de desagües, aunque es insalvable el estado de las pistas inexistentes de Av. Leonardo Ortiz frente a Oltursa y otros lugares.
Tenemos que reconocer que la Av. Balta ha mejorado con los modernos edificios privados. En la parte pública debe buscarse soluciones adecuadas para el Palacio Municipal y para el recinto universitario de la Esq. Bolognesi- Balta

Ruta Virtual
Siendo Internet ventana de información permanente , las únicas Web donde figura información sobre APEC - Chiclayo son las oficiales de APEC - Perú, Mincetur, y Ministerio de Producción ( organizador oficial). No hay aun un esfuerzo logrado de las Universidades locales para difundir el tema APEC , la Web del Gobierno Regional no tiene en su portada un link APEC, ni en la de SATCH y Gobierno Provincial de Chiclayo. Conviene hilvanar esfuerzos para presentar virtualmente APEC Chiclayo al Mundo

Otras sugerencias
Que con oportunidad, se emita una Ordenanza Municipal para que los vecinos que pinten sus fachadas y lo acrediten con foto, les sea reducido esto de sus arbitrios. Misma sugerencia para los establecimientos que instalen papeleras, incluidos sus logos, en las calles de la ciudad

Igualmente debiera emitirse ordenanza de embanderamiento para esa semana final de Agosto

Conclusión : ¿ Cuatro meses son suficientes , o estamos en “ Ruta Critica” ??

viernes, 11 de abril de 2008

SI SABEMOS CÓMO ENVEJECEMOS, PODREMOS MEJORAR NUESTRO ENVEJECIMIENTO.


Mgt. Francisca Constantino Facundo.
Profesora adscrita al departamento de Cs. de la Salud


El proceso de envejecimiento es inherente a la condición humana, aunque no siempre resulte fácil, asumirlo con naturalidad. No se puede evitar que cada día seamos más viejos que el anterior, ante esta realidad, puede posesionarse el miedo, la tristeza o la apatía ante la evidencia de los cambios morfodisiológicos del propio organismo interno y externo, dejando huella en uno mismo y en los seres queridos, al crear dependencia mal conceptualizada, factor que aclarare en el desarrollo del artículo.

Envejecimiento en nuestros días significa achaques, dolores, problemas, dependencia, soledad..., pero no siempre ha sido así, recordemos a nuestros antepasados, con una fuerza, vitalidad admirable, entonces, porque tiene que ser así ahora. ¿qué esta pasando?, ¿no nos damos cuenta de los problemas surgidos en esta etapa de la vida?, quizás los obviamos y se ve como algo lejano, ajeno a nosotros, no nos afecta, cuando lo cierto, es que, mañana estaremos viviendo la realidad en la que hoy se encuentran nuestros mayores.

Es importante señalar la existencia de muchas formas de envejecer: una de ella es de forma acelerada, con el objetivo de ganar "años a la vida" y con el riesgo de un alto grado de dependencia, o bien se puede envejecer a un ritmo normal, con la meta de dar "vida a los años" y con un bajo grado de dependencia que se centraría en la última etapa, este último es conocido como envejecimiento activo y numerosos estudios avalan sus resultados de menor dependencia tanto física como mental (menor deterioro cognitivo, afectivo y social).

Como podemos apreciar envejecimiento no es sinónimo de enfermedad, de dolor, de necesidad de ayuda de una o más personas, de demencia... Todo ello es sinónimo de un mal envejecimiento. Envejecer con salud, incluye tres componentes principales: baja probabilidad de padecer enfermedades o invalidez, elevada capacidad funcional física y cognitiva y mantenimiento de una vida activa en la sociedad pese a lo que en principio se puede pensar, no requiere una gran cantidad de dinero y está al alcance de todos.

Si sabemos cómo envejecemos, podremos mejorar nuestro envejecimiento, esto tiene que ver con los problemas de salud y sus consecuencias, fundamentalmente la dependencia. Por eso, el compromiso para ser ancianos activos, consiste en: adquirir una serie de hábitos de vida saludables (nutrición, ejercicio físico, mental y afectivo, abandono del consumo de alcohol, tabaco, exceso de café, plan de lecturas…etc.); seguir los controles médicos de salud recomendados y tener siempre el acompañamiento de la familia en haras de disfrutar de la paz y la acogida a que tienen tanto derecho, después que han gastado su vida en el servicio de la propia familia.

Podríamos decir finalmente “Ante la cabeza llena de canas, póngase en pie y honre la persona del anciano Porque lo primero que merece el de mucha edad es también mucho respeto” El anciano es un monumento del saber. Aunque en su vida no hubiera aprendido a leer, es un verdadero maestro por la experiencia que le dan los años: la sabiduría, y la prudencia.

¿Conocemos nuestro Genoma?


Blgo. César A. Ñique Carbajal
Profesor adscrito al Dpto. de Cs. de la Salud

El secuenciamiento total del genoma humano, ha sido considerado como un proyecto tecnológico internacional de gran envergadura, con un alto costo económico de aproximadamente 3, 000 millones de dólares y más de 13 años de investigación científica coordinada entre el sector publico y privado; sin embargo el conocimiento sobre el conjunto de la información genética de la especie humana, contenida a lo largo de la molécula del ADN de los 23 pares de cromosomas humanos en una célula diploide, esta lleno de misterios y quedan aun numerosas interrogantes acerca del significado funcional de estas secuencias. El mapa está listo, pero todavía queda mucho por andar para tener el manual de instrucciones completo, y por el camino pueden deshacerse algunas de las ideas más arraigadas hasta el momento sobre su estructura y funcionamiento (1).

Gracias al secuenciamiento del genoma humano nuclear podemos conocer su tamaño, el cual contiene aproximadamente 3 200 Mb (megabases), es decir tres mil doscientos millones de pares de bases, y una primera clasificación del genoma humano distingue por un lado los genes y secuencias relacionadas con genes (exones, intrones, regiones no traducidas que contienen elementos reguladores, etc), y por el otro, el ADN que están entre los genes, llamado también ADN extragénico o “de relleno” y que no codifica ninguna proteína ni contiene ningún elemento funcional. Curiosamente, la mayor parte del genoma humano (un 70 %) esta formada por este último, de forma que solo un 30% del genoma humano incluye secuencias relacionadas con genes. Lo mas sorprendente es que de este 30% solo un 5% esta constituido por ADN codificante (exones), siendo el resto ADN no codificante asociado a genes. Por tanto resulta que solo un 1,5 – 2,0 % del total del genoma humano es ADN codificante (2).

Chris Gunter, editor de Nature, unas de las revistas mas prestigiosas del mundo científico afirma que "cuanto más sabemos del genoma humano, más apreciamos lo complicado que es trasladar la información genómica a la función celular". Es decir, no se sabe la clave del asunto: por qué el genoma humano culmina en la formación del organismo. Esto es crucial entenderlo, porque partimos del esquema siguiente: un gen es portador de la información para la fabricación o síntesis de un determinado producto que puede ser una proteína, por ejemplo, ahora conocemos que el gen de la hormona insulina (proteína), se encuentra localizado en el brazo corto del cromosoma 11, y la formación de este polipéptido nos permite mantener nuestro nivel de glucosa en sangre dentro de los limites normales. Sin embargo, así se abarca una mínima parte de la secuencia del genoma, estamos hablando únicamente del 1,5 - 2% de la secuencia que responde a este ordenado modelo. La realidad es otra ya que nuestro genoma es mucho más que los genes que lo conforman y sobre todo que nuestro organismo obedece y responde al funcionamiento de más 120, 000 moléculas proteicas que interaccionan entre si y que son el producto de la edición de solo 20, 000 – 25, 000 genes que tiene el hombre. La pregunta que sale a la luz es ¿Qué funciones cumplen las secuencias que se está dejando fuera de este análisis?
Para responder a esta interrogante se creo el proyecto ENCODE, la gran Enciclopedia de los elementos del ADN, un consorcio internacional de investigadores encabezados por el National Human Genome Research Institute (NHGRI), el mismo instituto estadounidense que dirigió el Proyecto Genoma Humano el cual ha desarrollado un nuevo sistema que engloba todos los elementos del ADN a los que se atribuye una función biológica: los genes (incluidos tanto los que codifican proteínas como los que no cumplen esta función), los elementos que controlan la transcripción de los genes y los que tienen como responsabilidad mantener la estructura de los cromosomas y mediar en la dinámica de replicación del ADN. Algunos de los primeros hallazgos incluyen importantes descubrimientos sobre el papel de las regiones de ADN que no participan en la codificación de proteínas. ENCODE supera la vieja hipótesis que consideraba inactiva una gran parte del genoma, bautizado entonces como "genoma basura”. Por ejemplo, en los intentos por encontrar las causas de enfermedades hereditarias los investigadores estudian cientos de variaciones en la secuencia del genoma, conocidas como poliformismos de un único nucleótido, para ver cuáles no se asocian de forma aleatoria con el trastorno. Recientemente, estos estudios mostraron varias secuencias asociadas con la diabetes tipo 2 y sus manifestaciones relacionadas, pero sólo una minoría de las variaciones se encontraba dentro de los genes, la información clave estaba oculta en las regiones de ADN desdeñadas hasta ahora. Ahora tenemos que pensar cómo pueden estar contribuyendo estas modificaciones a los riesgos, incluso de forma pequeña o sutil, añade Chris Gunter.

En conclusión podemos decir que nuestros genes no son unidades independientes, sino que muchos de ellos se superponen y actúan en red compartiendo información. Además, es muy frecuente que codifiquen más de una proteína y ese 95% de “ADN basura” resulta que importa, y mucho. Por si fuera poco, todos estos elementos interactúan de maneras complejas y sobrepuestas. Así pues, la estructura y el funcionamiento de un solo gen presenta todavía muchas incógnitas. Con toda esta información sobre la mesa, la comunidad científica va a tener que replantearse algunas ideas que han mantenido durante mucho tiempo sobre qué son los genes y qué hacen, además de cómo han evolucionado los elementos funcionales; esto podría tener grandes implicaciones en muchas enfermedades humanas.

En la Facultad de Medicina de la USAT, pretendemos montar un equipo de trabajo que se dedique a investigar regiones del genoma humano en nuestras poblaciones, para hallar secuencias que se encuentren relacionadas a la predisposición a enfermedades o que confieran resistencia o sensibilidad a la terapia contra el cáncer. Para ello recientemente hemos adquirido un equipo moderno Termociclador de la marca Applied Biosystems, con el cual estaremos en la capacidad enseñar a nuestros estudiantes tales avances, de igual forma brindar un moderno y novedoso servicio a la colectividad de ultima generación.


1. Solari J A. Genética Humana: Fundamentos y aplicaciones en medicina. 3ª Ed. Editorial Medica Panamericana Bs. Aires 2004.

2. Novo FJ. Genetica Humana: Conceptos, mecanismos y aplicaciones de la Genetica en el campo de la Biomedicina. Ed Prentice Hall Madrid 2007.

miércoles, 9 de abril de 2008

RESCATANDO LA ESTRATEGIA DE ATENCIÓN PRIMARIA DE LA SALUD


Mg. Miriam E. Saavedra Covarrubia

Profesora adscrita al Dpto. de Ciencias de la Salud

Desde una perspectiva histórica, la estrategia de Atención Primaria de Salud-APS se constituyó en elemento central de las Políticas Nacionales de Salud y las respuestas sectoriales a los problemas de salud en los países de las Américas en los 29 años transcurridos desde la Conferencia Internacional de Alma Ata en Setiembre de 1978, donde se definió a la Atención Primaria de la Salud como "la asistencia sanitaria esencial basada en métodos y tecnologías prácticos, científicamente fundados y socialmente aceptables, puesta al alcance de todos los individuos y familias de la comunidad mediante su plena participación y a un costo que la comunidad y el país puedan soportar, en todas y cada una de sus etapas de desarrollo con un espíritu de autoresponsabilidad y autodeterminación".

La OPS/OMS reconoce a la Atención Primaria de Salud –APS- como la estrategia principal del sector salud para que los países alcancen las Objetivos de Desarrollo del Milenio: reducir la pobreza, eliminar la desnutrición aguda y crónica y reducir la mortalidad infantil y materna, mediante el acceso universal a servicios básicos integrales de salud, agua segura y disposición sanitaria de excretas y la prevención y control de las enfermedades, con la activa participación de las comunidades organizadas.1


La Atención Primaria de Salud representa el primer contacto de los individuos, la familia y la comunidad con el Sistema Nacional de Salud, constituyendo la función central y el núcleo principal dentro del proceso permanente de la asistencia sanitaria, donde la comunidad y los individuos dejan de ser objeto de atención y se convierten en actores que conocen, participan y toman decisiones sobre su propia salud, aspectos considerados por los profesores de ciencias de la salud de la USAT al ejecutar su praxis profesional comunitaria, fomentando la prevención de la enfermedad y promoción de la salud.2


Se podría decir que se han producido cambios significativos en el mundo y en nuestro país desde 1978 por la presencia de la APS. Los contextos políticos, sociales y económicos se han modificado no sólo como consecuencia de los procesos históricos nacionales, sino, y de manera creciente, por la configuración de un mundo cada vez más interdependiente y sujeto a vertiginosos cambios en todas las dimensiones de la vida humana. Han cambiado los patrones epidemiológicos y los perfiles demográficos de las poblaciones, en un marco de mayor exposición a riesgos y transformaciones en el ambiente social y económico. Se han experimentado también importantes cambios en los sistemas de salud, en el nuevo rol asumido por sus trabajadores, en las funciones del Estado y en el protagonismo de los ciudadanos ante la responsabilidad por el autocuidado.


1 Consejo Ejecutivo de la OMS, 11 de noviembre de 2003.
2 Organización Mundial de la salud. Informe sobre la Salud en el Mundo 2003: forjemos el futuro. Ginebra, OMS, 2003.

martes, 8 de abril de 2008

FIDELIDAD: SUSTENTO DE UNA VIDA LOGRADA

Lic. Enf. Carmen Luz Bazán Sánchez.
Profesora adscrita al Dpto.
de Cs. de la Salud
La complejidad del mundo actual con sus expresiones máximas tales como la revolución sexual, la emancipación de la mujer y la perdida de vigencia social del sentido religioso de la vida han menoscabado el modelo tradicional de familia como una institución protectora, cuna de libertades, aun así es reconocida por los jóvenes como su refugio preferente.

La fidelidad esta íntimamente unida a la libertad, ésta es perseverancia en la decisión original, tiene carácter trascendente por ello se mantiene firme, porque es el resultado del acto libre de elegir el objeto/sujeto al que será fiel, asumiendo las consecuencias de la decisión tomada.

La fidelidad, es una manera de vivir auténticamente, tomando decisiones trascendentes que susciten consecuencias conscientes y queridas, es decir, auténticas, libres; es por tanto amor a una verdad vital que nos integra, a diferencia de la infidelidad que es el primer desintegrador interno.

La fidelidad, es una transformación del amor, lo pone al día, lo actualiza, lo hace vigente e interesante, porque en el amor no esta dicha la última palabra, siempre hay algo que descubrir y lo haremos sólo si somos fieles, es decir si estamos dispuestos, abiertos, a querer más a quien o quienes ya queremos.
Amar, es vivir la vida de otros como si fuera la propia, con pudor, respeto, cuidado, dignidad, es decir amar a alguien por ser quien es y no por lo que tiene, puede tener o representa (cargos), entonces te amo por tu temple moral, tu carácter, tu presencia, tu figura, es decir por ser quien eres: mi familia, mis seres queridos, mis amigos, mis maestros…… mis alumnos, a aquellos a quienes los quiero mejores de lo que ahora son y por tanto me impulsan a dar lo mejor de mi mismo, porque creen en mí y no puedo fallar, porque mi ayuda los hace sentir queridos y ello es decisivo para educar.

miércoles, 2 de abril de 2008

MEDICINA BASADA EN EVIDENCIAS: UN RETO EN LA FORMACIÓN MÉDICA ACTUAL


Dr. Jorge Luis Ortiz Millones
Director de la Escuela de Medicina.

Medicina basada en evidencias, (MBE), “Evidence based medicine”, es una moderna metodología médica revelada en un artículo científico por un grupo de médicos investigadores de la Universidad de Mc Master, Canadá, liderados por David Sackett y Gordon Guyatt, publicado en la revista Journal American Medical Association (JAMA ).

Según Sackett, la MBE consiste en el uso consciente, explícito y juicioso de las mejores pruebas disponibles en la toma de decisiones sobre la atención integral de cada paciente. El foco es el paciente y no sólo su enfermedad o proceso. Por eso, desde la realización de un diagnóstico efectivo y eficiente hasta la elección de la mejor opción terapéutica, se identifican y consideran sus derechos, sus principios y sus preferencias. La MBE reúne la mejor evidencia científica, la experiencia clínica y los valores y preferencias de los pacientes.

La práctica clínica supone tomar decisiones constantemente, dar consejos y hacer recomendaciones, pero raras veces con absoluta certeza, pues convivimos a diario con la incertidumbre. Y ¿qué ocurre con los conocimientos del médico, adquiridos durante su formación médica? Por lo general, ya han perdido vigencia, así como la información contenida en los libros de texto, cuestionable al cabo de un tiempo. La cantidad de publicaciones y fuentes de información es enorme; y nuestro tiempo, conocimientos y medios para localizar, leer, interpretar y asimilar lo publicado no son suficientes.

En un artículo publicado en JAMA, en el año 2001, se detalla el cálculo de lo que un internista necesitaría leer para mantener su conocimiento, 20 artículos diarios ¡todos los días del año! A pesar de que la disponibilidad de revisiones sistemáticas y guías reduce la necesidad de lectura de artículos originales, todavía resulta muy difícil mantener el ritmo.

El continuo desarrollo de innovaciones promete constantemente una atención sanitaria más efectiva y segura. Se publican más de 10,000 ensayos o investigaciones clínicas cada año. Sin embargo, la introducción y aplicación de este conocimiento en la práctica presenta muchas dificultades, con lo que no se aprovecha en gran medida. La consecuencia inmediata es que existe una enorme cantidad de conocimientos que no se aplican o utilizan, numerosas innovaciones contrastadas con rigor que se diseminan muy lentamente, de forma que los avances no están limitados por el ritmo de los descubrimientos, sino más bien por el de su implantación, con la consiguiente repercusión en la calidad de la asistencia médica.

Así pues, parece claro que la buena investigación es necesaria, pero no suficiente para mejorar la práctica clínica. Asumimos que los resultados de la investigación se difunden de forma cercana al clínico, y que éste tiene acceso fácil y regular a esta información, además de poseer los conocimientos y capacitación para interpretarla y hacer una valoración crítica sobre ella. Sin embargo, a diario, comprobamos que la bibliografía médica todavía no está muy bien organizada ni es asequible para la toma de decisiones.

En este contexto, el principal valor de la MBE es el de ser una herramienta que trata de cuantificar y calificar qué dato o qué estudio tiene mayor validez; una herramienta que aclara la mejor forma de usar y aplicar “la evidencia”, y facilita su traslación a la práctica.

La MBE es considerada una nueva herramienta, necesaria y útil para el médico de nuestros tiempos. Su aplicación requiere tres elementos fundamentales: 1) un plan de estudios que sustente el desarrollo de esta competencia, con asignaturas como: Estadística, Metodología de la Investigación, Epidemiología y Clínica Médica; 2) profesores entrenados en el uso adecuado de esta técnica, y 3) estudiantes motivados para la búsqueda, interpretación y juicio de la literatura médica. De la totalidad de Escuelas de Medicina del Perú, solo dos han considerado esta competencia en la formación de sus estudiantes.


Sin embargo, la MBE es una respuesta a las necesidades y demandas de mejora de la calidad de la atención médica. Pretende disminuir el tiempo transcurrido entre los descubrimientos médicos (a través de la investigación) y su implementación, así como promover la competencia profesional, optimizando el tiempo que los profesionales requieren para mantener su práctica al día. Su estrategia se fundamenta en el aprendizaje de una metodología y en la búsqueda y aplicación de información científica y de protocolos y guías desarrollados por otros.


La Escuela de Medicina de la USAT ha considerado el logro de la competencia para la lectura crítica de la literatura médica (MBE) en sus estudiantes, a través de su currículo, profesores y tecnología informática, así como del apoyo de la futura Unidad de Epidemiología Clínica, lo que permitirá a sus futuros médicos “practicar la Medicina con ciencia, arte y ética”, elementos esenciales exigidos por la sociedad actual.



ReSackett DL, Haynes RB, Tugweell P. Epidemiología clínica. Una ciencia básica para la medicina clínica. Ed. Díaz de Santos, Madrid, 1989.